Serie: Las cinco marcas de la Misericordia – Parte 1, Sesión III

Texto: Lucas 10:30-37

Fecha: 04/20/23

Enfoque: Discipulado, Servicio y Evangelismo

Pastor: Josias Lima

LA MISERICORDIA AYUDA A LOS HERIDOS. 

Objetivo del Estudio: Ayudar a la persona a PONER en práctica la SEGUNDA marca de la misericordia; y aclarar a cerca de la decisión y beneficios de ayudar a los heridos.

I. ROMPE- HIELO: ¿Es fácil ayudar a personas que no conocemos? ¿Ha ayudado a alguien, pensando en obtener alguna cosa? ¿Estaría listo hoy, para ayudar a bañar a un mendigo, con olor desagradable?

II.  EDIFICACIÓN 

     ¿Qué factor de la misericordia está presente en, AYUDAR A LOS HERIDOS? Aclare cómo se logra el éxito, en estas acciones.

  Versículo para memorizar:

     “A su alma hace bien el hombre misericordioso.” Proverbios 11:17

Texto clave: 

       ³⁰ Jesús respondió:

―Bajaba un hombre de Jerusalén a Jericó, y cayó en manos de unos ladrones. Le quitaron la ropa, lo golpearon y se fueron, dejándolo medio muerto. ³¹ Resulta que viajaba por el mismo camino un sacerdote quien, al verlo, se desvió y siguió de largo. ³² Así también llegó a aquel lugar un levita y, al verlo, se desvió y siguió de largo. ³³ Pero un samaritano que iba de viaje llegó a donde estaba el hombre y, viéndolo, se compadeció de él. ³⁴ Se acercó, le curó las heridas con vino y aceite, y se las vendó. Luego lo montó sobre su propia cabalgadura, lo llevó a un alojamiento y lo cuidó. ³⁵ Al día siguiente, sacó dos monedas de plata^[a] y se las dio al dueño del alojamiento. “Cuídemelo —le dijo—, y lo que gaste usted de más, se lo pagaré cuando yo vuelva”. ³⁶ ¿Cuál de estos tres piensas que demostró ser el prójimo del que cayó en manos de los ladrones?

37 ―El que se compadeció de él —contestó el experto en la ley. ―Anda entonces y haz tú lo mismo —concluyó Jesús. Lucas 10:30-37.

Tres maneras en las que respondemos, a las personas necesitadas.

A. Mantengo mi DISTANCIA.

      Jesús le respondió:

—Un hombre iba de Jerusalén a Jericó. Unos ladrones lo rodearon, le quitaron la ropa, lo golpearon y lo dejaron medio muerto. ³¹ Dio la casualidad que venía un sacerdote por 2 el mismo camino. Cuando vio al hombre, siguió por otro lado. Lucas 10:30-31

B. Soy curioso, pero NO ME INVOLUCRO.

     De la misma manera, un levita pasó por el mismo lugar, vio al hombre, pero también siguió por otro lado. Lucas 10:32.

C. Me acerco lo suficiente para ATENDER.

     ³³Pero un samaritano que viajaba por ahí llegó a donde estaba el hombre, y al verlo se compadeció de él. ³⁴ Entonces se acercó al hombre, derramó aceite y vino en las heridas y las vendó. Luego lo montó en su animal de carga y lo llevó a una pequeña posada donde lo cuidó. ³⁵ Al siguiente día, el samaritano le dio dos monedas de plata al encargado de la posada y le dijo: “Cuídalo, y si se necesita más, te pagaré cuando regrese”. ³⁶ ¿Cuál de los tres crees tú que fue el semejante del hombre que estaba medio muerto en el camino?

37 El experto de la ley le contestó:

—El que tuvo compasión de él.

Entonces Jesús le dijo:

—Ve y haz tú lo mismo. Lucas 10:33-37.                                                                        

III.  APLICACIÓN

a. ¿Qué acciones debo yo llevar a cabo con mi familia, mis amigos y mis hermanos(as); cuando entiendo que la misericordia actúa donde otros se alejan?

b. ¿Qué oportunidades tiene usted en la iglesia de servir a los demás, con la frase: La misericordia no tiene miedo de ensuciarse las manos.

c. La misericordia es ayudar a la gente, sin importar quiénes son, lo que parecen, o de dónde vienen. De acuerdo con tu experiencia de vida: ¿Fuiste tú, exitoso 100% en tus acciones con las personas? ¿Cuál sugerencia podrías compartir, para crecer por medio de acciones de misericordia?

d. ¿Qué respuesta en relación a los heridos, está más cerca de ti, de acuerdo con el texto de Lucas 10: 30-37? ¿Cómo piensas que en tus relaciones, puedes poner en práctica las acciones, según la biblia?

IV.  EVANGELISMO  

     En el estudio de hoy, usted ha aprendido que ayudar a los heridos, es un gran desafío. No nos olvidemos: La manifestación del amor de Dios por nosotros fue por su gracia. Por medio de la enseñanza que tuvimos, entendemos que Dios nos ha dado la oportunidad de servir con excelencia a los heridos. Estos, necesitan de Cristo. Sugiero, que Usted, como cristiano, permanezca enfocado en las tres personas que ha elegido para dedicar un tiempo de oración, pidiendo por sus vidas. No olvidemos: Amar a Dios, amar al prójimo y servir a los demás (nuestro eslogan). Separe, un tiempo cada día de la semana, para orar por ellos. ¡USTED estará ayudando a los heridos!

V.  TIEMPO DE ORACIÓN…

¡Mejor juntos!